miércoles, 15 de junio de 2011

FERIA 2011

Ya huele a feria... ese olor a pescadito frito. Los bares perecían que se habían puesto de acuerdo, no lo entendía. Con los nervios no me acordaba de nada por qué olía tanto a pescado y no por ejemplo a cosido. Ahora lo pienso y me hecho a reír. Y la verdad es que tenía razones por lo que estar nerviosa. Esta noche tenía que bailar... lo llevo haciendo desde que era muy pequeña, con cuatro años más o menos. Ya empezaba a comer muy poco. Los nervios me atacaban y no tenia ganas de comer. Ea pues ala terminar de bailar, me quede muy satisfecha con mi actuación. Ya me estaba esperando el viernes. Este día no me costó levantarme, tenía fiesta en el cole. Después de terminar de comer, fui a arreglarme un poco. Salí con mis amigas, teníamos muchas ganas de ver a los niños jugar al fútbol. Y además que casi siempre viene que son muy guapos y asi nos alegramos las vistas, jajaja. Entonces cuando eran las nueve y media más o menos, nos recogimos para arreglarnos.
Bueno ya había ganas de salir a bailar, montarse en los cacharritos, ver a gente... mucha gente, reírme con mis amigas... al cabo de un ratito las encontré. El viernes fue fantástico.
El sábado nos reunimos con los amigos en mi casa para comer. Después mis papás se durmieron un poquito, si no luego por la noche no aguantaban. Yo mientras estaba con mi prima. Me enteré que estaba con muletas y mi deber era estar con ella, antes que estar viendo el fútbol.
Puff mi madre me llamaba, ella toda nerviosa me dijo : Venga Rosa, que ya mismo está aquí tu hermano para peinarnos. Decidí irme a toda prisa.
-Ves mamá ya estoy preparada y, ¿tanta prisa para esto? Le dije con tranquilidad
-¿Para esto? ¿Te parece poco una hora y media? Me preguntó.
-Oi ¿ya son las diez y media?... Bueno ¿ya están aquí otra vez tus amigos? Le dije enfadada.
Ya se fue no era plan de ponerse a discutir en feria. Cené con mi hermano, porque a mi me daba vergüenza salir con toda la gente que había en mi patio. Pues al terminar me fui a la calle. Me monte en la olla unas pocas de veces y en las colchonetas. Cuando estaba la plaza más ambientada pues ya nos fuimos para bailar. Me recogí a las seis y media o por ai. ¡Qué sueño! Pero me tenía que levanta para vestirme de gitana. Salimos a comer al bar. Di unas vueltecillas por el pueblo. Cuando eran las siete, todos estaban revolucionados con las bicicletas y las motos. Pero el alcalde no tenía preparado nada. Así que como casi todos los años fueron mi prima Elena, mis padres, mi hermano y sus amigos para ayudarle. Al finalizar las carreras, se entregaron los premios. Yo me fui con mi prima Nuria a su casa. Luego encontramos a sus a miga y nos montamos juntas en ella olla. Yo finalice la feria comiéndome un rico gofre.